¿Alguna vez te ha pasado que el marisco que compraste no tenía sal?
A nosotros es la primera vez que nos sucede y tanto las gambas como los langostinos a pesar de ser de muy buena calidad no tenían sabor alguno, y es que venían sin nada de sal. Por suerte este problema tiene muy fácil solución.
Hoy te contamos cómo arreglar gambas, langostinos, camarones y Marisco en general sin sal de una forma muy fácil.
Aunque no es común encontrarnos con el marisco sin sal, se puede presentar esta situación, pero esto no tiene porqué ser un problema, ya que la solución a este inconveniente es súper simple, como verás más adelante.
La verdad es que es mucho más llevadero encontrarnos con que las gambas, los camarones, o cualquier tipo de marisco no tenga sal; ya que se puede servir acompañado de una salsa, como por ejemplo una salsa mayonesa y disimular el inconveniente; aunque a decir verdad el sabor del marisco no será lo mismo, pues el marisco en su punto de sal es muchísimo más delicioso y se nota la diferencia, incluso acompañado de cualquier salsa.
Ingredientes para arreglar el marisco sin sal
1½ cuchara sopera de sal
Gambas y langostinos cocidos sin sal
Cómo arreglar las gambas, langostinos, camarones y en general, el marisco sin sal
En una fuente con agua del grifo vamos a añadir suficiente sal, en mi caso más o menos 1 cuchara y media de sal; la mezclamos bien, hasta que la sal se disuelva.
Ahora vamos a sumergir las gambas, en este caso son unas gambas blancas de Huelva; nos aseguramos de que todas estén en contacto con el agua.
Podemos dar la vuelta a las gambas, después de unos 15 minutos; es decir las que estaban abajo las dejamos en la parte de arriba, para asegurarnos que todas estén en contacto con el agua salada.
Dejamos en remojo el tiempo que haga falta.
En este caso las gambas estuvieron sumergidas en agua con sal unos 40 minutos; tiempo después del cual pelamos y comprobamos el sabor y te puedo decir que las gambas quedarán en su punto de sal!!!
Una vez que las gambas han tomado la sal necesaria las retiramos del agua y las dejamos en una fuente para que escurra el agua sobrante.
Con los langostinos nos ha pasado exactamente lo mismo, pero estos venían pelados, así que solo los dejamos 20 minutos en remojo, tiempo suficiente para que quedarán listas para comer y por supuesto con un delicioso sabor.
Y ahora solo nos queda emplatar para empezar a disfrutar de un buen plato de marisco en el punto correcto de sal.
Suele ser común encontrarnos con que el marisco está salado, pero el caso contrario como el que nos ocupa hoy no lo es tanto. Anteriormente vimos cómo arreglar el marisco salado y ahora ya sabes también cómo recuperar el marisco sin sal!!!
Espero que este truco te sea de utilidad y de ahora en adelante te dé igual si el marisco está salado, o si no sabe a nada porque le falte sal; lo podrás solucionar fácilmente
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